Hay dos ingredientes muy importantes que forman parte de la FELICIDAD:
Saber postergar las gratificaciones, para tener paciencia y ser perseverantes con lo que deseamos y tolerar la frustración, para no perder la motivación cuando las cosas no salen como esperábamos o no recibimos lo que creemos que merecemos.
Ambas actitudes suponen un autocontrol importante por parte de la persona, e implican un gran paso en su desarrollo personal.
¿Sabías que para aprender a postergar las gratificaciones y a tolerar la frustración la educación financiera es de gran ayuda?
Sí! a través del ahorro, aprendemos a postergar las gratificaciones y cuando evitamos el consumismo, aprendemos a tolerar la frustración.
Por eso, es tan importante que eduquemos financieramente a los niños, porque no sólo les ayudará a gestionar bien su dinero cuando sean adultos, sino que además, contribuirá a algo mucho más importante …su futura felicidad.